Bueno, pues después de la gran noticia y la gran sorpresa, empezó la
aventura.
La verdad es que después de esa primera ecografía donde se vieron por
primera vez mis bichitos, fui a las dos semanas para escuchar sus corazones, y
ahí estaban galopando a marchas forzadas. Fue una sensación increíble.
Después de esa segunda eco, tuve que ir por pequeñas pérdidas, que
casualmente coincidían con la fecha que supuestamente me tendría que venir la menstruación
si no estuviese embarazada. En esa eco ¡¡ya vi a mis peques con más forma!! .
Al poco ya fui a la de la segunda falta y luego a la de la tercera, porque
como lo llevaba por privado pues cada mes fichaba. La de la semana 12 fue
increíble, los vi perfectamente formados, con sus brazos, cabeza, piernas, ¡¡y
solo medían 5 cm!! y fue cuando pudieron ver que uno era un niño y desde
entonces se llamo Alex. La verdad es que fue la que más me impactó, era
maravilloso cómo se movían y yo todavía no los sentía, me parecía sorprendente.
Después de esa ecografía, volví a tener pérdidas, y precisamente me pilló
en Ibiza de fin de semana y me asusté mucho. Me quedé relajada y poco pudimos
hacer. A la llegada a casa, fui a la comadrona de la seguridad social que me
llevaba también control aunque fue pérdida de un solo día, y me dijo que era
porque el útero se estaba agrandando y estaba cogiendo forma y que no era nada,
así que gracias a Dios todo se quedó en un susto.
Ni durante este primer trimestre ni durante el resto de embarazo tuve
vómitos, ni nauseas, ni mareos, ni tan siquiera ese sueño que todo el mundo
tiene, ¡¡estaba estupenda, de no ser por
mi gran barrigota que crecía por momentos!!
Continúa en el siguiente capitulo... ya siento cómo se mueven.
Natalia
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